Por eso, os digo que el reino de Dios se os quitará a vosotros y será entregado a un pueblo que produzca los frutos que corresponden al Reino. (Mateo 21:43)
René Descartes, el filósofo francés de la ilustración, afirmó: "pienso luego existo" indicando de este modo que el centro del ser humano es su intelecto, que somos, ante todo, seres pensantes. Esto, como tantas cosas ajenas al Evangelio se nos ha pegado en nuestra forma de entender la fe. Por eso, damos tanto énfasis a las doctrinas, la teología y hay tantos inquisidores digitales buscando a quien quemar.
Jesús siempre enfatiza los frutos y estos nacen, como Él mismo afirma, del corazón. Seremos conocidos por nuestros frutos, nos ha llamado para que demos fruto, glorificamos al Señor cuando damos fruto, etc., etc. Esta muy bien toda la pureza doctrina pero si no produce fruto no sirve para nada. Es más, hay la seria advertencia de Jesús que el reino nos será arrebatado y dado a otros que extrañamente están dando el fruto que se supone deberíamos dar nosotros. No nos confiemos, no desarrollemos una falsa seguridad personal y comunitaria. No es la doctrina lo que cuenta, sino la doctrina que produce el fruto que Dios espera.
¿Tu nivel de conocimiento doctrina y tus frutos van a la par?