Este es el ayuno que deseo: abrir las prisiones injustas, romper las correas del cepo, dejar libres a los oprimidos, destrozar todos los cepos; compartir tu alimento con el hambriento, acoger en tu casa a los vagabundos, vestir al que ves desnudo, y no cerrarte a tus semejantes. (Isaías 58:6-7)
Dios, a través del profeta, indica que la verdadera religiosidad siempre tiene que estar orientada hacia el prójimo, porque el Señor no necesita nada de nosotros y el prójimo si. Jesús se hizo eco de las palabras del profeta cuando afirmó que Su deseo era misericordia -algo que va orientado hacia el prójimo- en vez de sacrificios -algo que va orientado hacia Dios-. Santiago, el hermano de Jesús afirmó que la auténtica religión es aquella que se orienta hacia el vulnerable.
Tiene todo el sentido del mundo y está en coherencia con todo lo que enseña la Escritura. Abrahán fue elegido para bendecir a las naciones; Israel fue llamado para bendecir a las naciones; la iglesia es formada para bendecir a un mundo roto por medio de la proclamación y demostración del Reino que está ya aquí aunque no culminado en su totalidad.
¿Estas alineado con la auténtica religiosidad de la que hablan las Escrituras?